miércoles, 26 de septiembre de 2012

La obra del Espíritu Santo 3/4 y 4/4



Aclaración: Este estudio de Romanos 8 se predicó durante 4 domingos. Aunque los puntos aparecen numerados desde el numero uno, realmente son los puntos del siete al doce. Para ver los seis primeros visite el siguiente link: http://www.icccriohacha.blogspot.com/2012/08/la-obra-del-espiritu-santo-14-y-24.html

1. Mediante el Espíritu Santo somos libres del temor. V 15 Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡*Abba! ¡Padre!»

Cuando el Espíritu de Dios llega a nosotros dejamos de ser esclavos del miedo. 

Hay muchos hoy presos del miedo: miedo al futuro, al fracaso, a la soledad, a la escasez, al castigo, Miedo a la muerte. Hay incertidumbre sobre donde pasarán el resto de la eternidad. No viven tranquilos por el temor. El temor los paraliza.

En cambio quien tiene al Espíritu Santo de Dios habitando en su corazón no tiene miedo, pues sabe claramente por el Espíritu Santo quien es el Dios al que le sirve y cuál va a ser su destino final.

Hay Muchos que viven con miedo a que Dios lo rechace (no puedo agradar a Dios con nada de lo que hago, nada es suficiente) 


O que no lo tenga en cuenta (Dios bendice a todos menos a mí) 


Hay gente de muchas religiones que están ahí por miedo, no por amor al Padre sino por temor al castigo. Muchas veces es un miedo infundido por los padres y tristemente este temor es alentado por los líderes y pastores  (Cuidaíto se va de aquí porque eso le van a caer las 10 plagas de Egipto, las siete del Apocalipsis, y las maldiciones de Deuteronomio 28) AHH me quiero ir, pero me toca aguantarme a esta secta, a este pastor, a estos locos, porque si no Dios me da duro….

  Pero los que vivimos en el Espíritu no estamos esclavizados al miedo, Porque como vivimos en el Espíritu, hacemos las cosas del Espíritu. ENTONCES SABEMOS QUE DIOS NOS MIRA CON AGRADO. SABEMOS QUE ÉL NOS TIENE EN CUENTA, SABEMOS QUE NOS BENDICE Y QUE ESCUCHA NUESTRAS ORACIONES, PORQUE LE PERTENECEMOS, TENEMOS EL SELLO DE PERTENENCIA DE DIOS QUE ES EL ESPÍRITU SANTO. Y no tenemos miedo a nada y porque sabemos que lo peor que puede pasarnos en la dificultad es la muerte de este cuerpo, pero más nada. Nuestra alma y nuestro Espíritu quedan intactos. Porque cuando tenemos al Espíritu Santo morando en nuestro corazón tenemos la certeza que si morimos vamos directamente a encontrarnos con Dios. Por eso ya no le tememos a la Muerte. Y si no le tememos a la muerte no le tememos a nada, sabemos que en medio de todo Dios tiene el control.

No tememos al infierno, ni al diablo, ni a los demonios (Hay mucho Cristiano que vive asustado de lo que el enemigo le vaya hacer, yo sé que vivimos en una guerra espiritual, pero cuando hay un énfasis la cosa ya no es sana. Es que el diablo me ataca, es que, qué guerra tan tremenda, me ha dado golpe, Ay, es que me echaron brujería, que yo saqué una botella del patio ay, ay, ay), NO, YA NO, ya no tememos a esas cosas pues el Espíritu Santo habita en nosotros y por Él le hemos VENCIDO porque MAYOR ES EL QUE ESTÁ EN NOSOTROS QUE EL QUE ESTÁ EN EL MUNDO. 1 Juan 4:4. 

Ese Espíritu Santo es el que nos impulsa a buscar a Dios de todo corazón y dice el Salmo 34:4 dice: busqué al Señor y Él me oyó y me libró de todos mis temores.

Hay que entender también que aquí se refiere a una vida de esclavitud, Pablo usa la ilustración del esclavo, para mostrar la diferencia entre el Esclavo y el hijo. El Esclavo teme al castigo de su amo, hacía las cosas bien porque si no el amo le daba duro, no porque quisiera al amo, hacía todo por temor, su motivación para hacer las cosas era el temor. Sin embargo, había amos buena gente, que se encariñaban tanto con un esclavo, que lo adoptaban. Quizá uno que vieron crecer en la casa, quizá uno en el que vieron potencial, ahora estos esclavos a los cuales adoptaron tenían todos los derechos de un hijo legítimo.

Fíjate: Antes, sin Cristo en nuestro corazón, sin la llenura del Espíritu Santo éramos esclavos. Esclavos del MIEDO, porque éramos ESCLAVOS DEL PECADO, pero Dios nos adoptó, pagó por nosotros, no con dinero, sino con algo muchísimo más valioso: la Sangre de Jesús,  para que dejáramos de ser esclavos y nos convirtiéramos ahora en sus hijos. 

Por eso es que ya no tememos, porque por medio de la obra de Cristo, y con la confirmación del Espíritu Santo, ahora tenemos un Padre. Tenemos al Dios del cielo, al Todopoderoso, al más grande por Padre. 

Ya no somos esclavos, Somos hijos, y los hijos no tienen ese temor malsano, ahora tienen un temor reverente, un temor perfecto, un temor a ofenderle o desagradarle en algo, ahora hacen las cosas bien, no por temor al castigo, ahora hacen las cosas por amor al Padre. Eso nos dirige naturalmente al siguiente punto.

2. Mediante el Espíritu Santo sabemos que somos hijos de Dios. Clamamos “Abba Padre”
V 15 Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡*Abba! ¡Padre!»


Solo por el Espíritu Santo en nuestra vida, que nos da Jesús cuando nacemos de nuevo podemos decir saber con certeza que somos hijos de Dios. El Espíritu Santo da testimonio a nuestro Espíritu que somos hijos de Dios. 

¿Quiénes son los hijos de Dios? Pues la tradición nos dice: todos somos hijos de Dios. La Biblia no dice eso. Uno no puede poner a todo el mundo en esa categoría. 

Uno no puede decir que este violador, ese ladrón, ese asesino que sigue haciendo daño es un hijo de Dios, que este Hechicero activo es un hijo de Dios, (Pablo en hechos 13 le dijo a un falso profeta: hijo del diablo, nunca dejarás de distorsionar los caminos Verdaderos del Señor? 

Pero tampoco puede decir que este que no le hace daño a nadie, que este ateo pero buena persona, que este religioso buena gente es hijo de Dios. A propósito, Jesús les habló a unos judíos muy religiosos, (Juan 8) y les dijo en su cara que eran hijos del diablo, por su hipocresía, por su dureza de corazón, porque no lo recibían a Él. Y es que todos estamos en la categoría de pecadores. 

Pero ¿qué dice la Biblia al respecto? Juan 1:12 dice que a los que le recibieron, a los que creen en su nombre se les dio el derecho de ser llamados hijos de Dios. También en 1 de Juan dice que los que tienen el Espíritu de Dios son hijos de Dios. 

Hijo de Dios es aquel que ha nacido de nuevo, que ha nacido del Espíritu, el Espíritu Santo tiene que activar tu espíritu. Hijo de Dios es aquél que ha recibido en su vida a Jesús mediante la fe en Jesucristo, como único Señor y como único y suficiente Salvador. Hijo de Dios es aquél que por la fe le ha abierto su corazón a Cristo.

Y si eres hijo de Dios, el Espíritu Santo convence a tu Espíritu de que lo eres y que con toda la confianza puedes llamar a Dios Padre. 

Esto es tan común hoy en día, (hasta hay canciones al respecto. Papa Dios – Ay Papá) Es tan común hoy, pero en esa época era realmente tan revolucionario!!! Los Judíos no eran capaces de llamar a Dios ni siquiera por su nombre, mucho menos les pasaba por la mente llamarlo. Padre.

Cuando Jesús llamaba a Dios Padre, ellos le querían matar.  Y ahora no solo lo llamaba Padre, sino que enseñaba a sus discípulos a llamarlo Padre. 

Para nosotros el Padre Nuestro es tan cotidiano, pero para ellos oír a Jesús decir: Ustedes orarán así: Padre Nuestro que estás en los Cielos…. Un momento Jesús, que dijiste? Escuchamos bien? Podemos llamar a Dios Padre? Qué privilegio, pero ahora mediante el Espíritu Santo, no solamente lo consideramos nuestro Padre, o lo llamamos nuestro Padre, ahora podemos llamarlo Papi, Papito. Te imaginas el Choque en la mente de estos Judíos? 

  Aquí aparece el termino Abba, déjame explicarlo: Cuando uno es pequeño y está aprendiendo a hablar, hay palabras que le quedan muy difíciles, así que en lugar de decir Padre dice uno una palabra más fácil: Papi, pa, papá. En todos los idiomas del mundo hay una expresión fácil de pronunciar para dirigirse al Padre de uno. Daddy, Papi, Appa, Pai. (la erre es  muy difícil de pronunciar, si no crees pide a un norteamericano que pronuncie "PADRE") Esta expresión se convierte en una forma cariñosa, íntima para dirigirse a su Padre. Abba es la expresión cariñosa de un judío de esa época hacia su Padre. El padre cuando escuchaba al hijo diciendo ABBA se derretía. “Vengan todos!!! dijo Abba, dijo Abba!!! Repide bebé... Aaaabbaaa” Es una expresión de confianza. No se le llamaba así al papá en la calle sino en la intimidad y el calor del hogar.

Pero nosotros que hemos nacido de nuevo, que tenemos en nuestra vida al Espíritu Santo de Dios tenemos el privilegio de acercarnos con confianza Papito!!! Abba Padre. Somos los bebés de Papa Dios, los hijitos de Papi.

TU DIRÁS, PERO SI EL PADRE DEL CIELO ES COMO EL PAPÁ QUE YO TUVE ESTAMOS EN LA OLLA. YO SE QUE HAY PADRES FALTONES, QUE FUERON AGRESIVOS, PADRES AUSENTES, PERO EL PADRE DEL CIELO NO ES ASÍ, ES AMOROSO, MISERICORDIOSO, UN PADRE QUE TIENE CUIDADO DE MI, QUE ME TIENE PENDIENTE.

 Entonces, ahora que somos hijos, que el Espíritu Santo está en nosotros podemos clamar, papito!!! Con mucha reverencia, pero con mucha confianza. 

Ahora podemos agradar a nuestro Padre por el Espíritu Santo, ahora podemos acercarnos a nuestro Papi para PEDIRLE lo que necesitamos. (Pedías tú a tú papa cuando niño?) Ahora podemos expresarle a nuestro Dios nuestro cariño, con el mismo cariño que un niño se expresa a su papá. (¿No dice la Biblia que tenemos que hacernos como niños?) y esa confianza y esa certeza de que somos los hijos queridos de Dios nos la da el Espíritu Santo que mora en nosotros. 

 Yo te puedo convencer de que si has recibido a Cristo por fe eres hijo de Dios, pero aquí (señalando la cabeza).. en el intelecto; pero aquí (Señalando al Corazón)... en tu interior, solo tú puedes saberlo, por medio del Espíritu Santo quien da testimonio a tu corazón de que eres hijo de Dios.

3. Mediante el Espíritu Santo tenemos la certeza de que aunque en esta tierra pasemos por dificultades tenemos una herencia y un futuro glorioso. V17-25 

17 Y si somos hijos, somos herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, pues si ahora sufrimos con él, también tendremos parte con él en su gloria.

La gloria futura

18 De hecho, considero que en nada se comparan los sufrimientos actuales con la gloria que habrá de revelarse en nosotros. 19 La creación aguarda con ansiedad la revelación de los hijos de Dios, 20 porque fue sometida a la frustración. Esto no sucedió por su propia voluntad, sino por la del que así lo dispuso. Pero queda la firme esperanza 21 de que la creación misma ha de ser liberada de la corrupción que la esclaviza, para así alcanzar la gloriosa libertad de los hijos de Dios.

22 Sabemos que toda la creación todavía gime a una, como si tuviera dolores de parto. 23 Y no sólo ella, sino también nosotros mismos, que tenemos las *primicias del Espíritu, gemimos interiormente, mientras aguardamos nuestra adopción como hijos, es decir, la redención de nuestro cuerpo. 24 Porque en esa esperanza fuimos salvados. Pero la esperanza que se ve, ya no es esperanza. ¿Quién espera lo que ya tiene? 25 Pero si esperamos lo que todavía no tenemos, en la espera mostramos nuestra constancia.

 Como somos hijos tenemos una herencia de parte de Dios. El Ser hijos de Dios, sellados con el Espíritu Santo trae a nuestras vidas muchos privilegios, entre ellos una herencia. Una herencia que nos garantiza un futuro glorioso. 

  Yo he visto cómo una herencia le arregla la vida a la gente. Conozco un amigo, andaba llevao, pasando dificultades, ganándose la vida de manera muy difícil y pal diario. Las tierras de su padre se valorizaron muchísimo y cuando las vendió, el padre en vida repartió la herencia. ¡Cómo le cambió la vida a este hombre!, se convirtió en un hombre de negocios, ahora hasta simpático se veía. Este hombre sufrido, que se ganaba la papita de forma tan difícil ahora vivía tranquilo, compro casas las arrendó, hizo negocios, inversiones, su vida era otra cosa.

 En esta tierra vivimos momentos de dolor, de sufrimiento, de persecución, y es posible que las cosas no mejoren, todo lo contrario. Si miras las noticias aquí y allá te das cuenta que este mundo va de mal en peor. Dolor, sufrimiento, dificultades, problemas económicos, pero nuestro futuro no es así, es glorioso. 

En muchas áreas de nuestra vida estamos lleváos, como mi amigo, ¿pero sabes qué? Tenemos una herencia que nos está esperando. Parte de ella la recibimos aquí, pero la mayor parte de esa herencia que no la recibiremos en esta tierra.

  Los problemas no se acaban cuando llegas a Jesús. Cuando llega Jesús a la vida de uno, su vida es transformada, el Espíritu Santo lo llena a uno, las cadenas que te ataban al pecado son rotas, llega una paz y un gozo a tu vida que no puedes describir, pero eso no quiere decir que se acabaron todos los problemas, la vida y las dificultades de un mundo caído por el pecado y gobernado por el enemigo siguen, sus ataques no paran. No es que se acaban los sufrimientos. Pero ¿sabes que hace más llevadero este asunto? El saber que tenemos una herencia en el cielo.

Además de esto, frente a las situaciones difíciles de la vida, es interesante que la Biblia nos muestra, en este mismo capítulo 8 de romanos que estamos estudiando, que somos más que vencedores, que ninguna situación por difícil que sea nos va a separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús. Vamos a vencer en medio de las pruebas de esta vida.

 Eso se debe a que Dios nos ha dado ya un anticipo de esa herencia, una parte, unas primicias de lo que vamos a recibir. Y ese anticipo es lo que la Biblia llama las arras del Espíritu. 2Cor 1:22 el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.

Las arras son el dinero que tú das para pisar el negocio. Como quien dice Dios ya pisó el negocio con nosotros, y la garantía de que DIOS nos tiene reservada esa herencia es Dios en persona en nuestra vida. 

Es decir, ese anticipo de nuestra herencia es el Espíritu Santo en nuestra vida. 23 Y los creyentes también gemimos —aunque tenemos al Espíritu de Dios en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futura —porque anhelamos que nuestro cuerpo sea liberado del pecado y el sufrimiento. Nosotros también deseamos con una esperanza ferviente que llegue el día en que Dios nos dé todos nuestros derechos como sus hijos adoptivos,* incluido el nuevo cuerpo que nos prometió. NTV

Cuando yo recibí el Espíritu Santo en mi vida, fue una experiencia tan increíble, una llenura, un poder, una paz, un gozo que nunca había experimentado, que yo pensaba, si esto es así ¿cómo será el cielo? El Espíritu de Dios en nosotros es una muestra anticipada de la gloria futura. Que nos espera.

Ahora tenemos un poder superior en nosotros que nos ayuda a superar esas situaciones, ahora tenemos a Cristo en nuestro corazón, ahora tenemos al Espíritu Santo en nuestro interior para salir adelante en medio de las luchas y pruebas y que nos recuerda que todavía tenemos el resto de esa herencia en Dios.


SI EL ANTICIPO ES ASÍ, ¿CÓMO SERÁ LA HERENCIA COMPLETA?

f. Esto me dice que esos sufrimientos no serán eternos, como lo veníamos diciendo, en esta vida tendremos dificultades, quizá enfermedad, dolor, muerte, pero el futuro que nos espera con Dios, cuando nuestro cuerpo sea redimido, en el lugar que está preparando para nosotros no hay nada de eso: Dice la Biblia que allí no habrá tristeza ni llanto, no hay enfermedad, no hay pecado (infidelidad, mentira, traición) no hay sufrimiento. Y tú puedes decidir hoy si vas a ese lugar o no. Eso lo decides cuando decides hacerte un hijo de Dios. 

LA HERENCIA ES PARA LOS HIJOS, NO PUEDES RECIBIR LA HERENCIA SI NO ERES UN HIJO.

Ese día es tan importante, tan grande para la humanidad que dice la Biblia que la creación entera anhela que llegue ese día. 22 Sabemos que toda la creación todavía gime a una, como si tuviera dolores de parto.

 Hermanos, Dios nos promete una gran herencia, Jesús nos está construyendo un lugar a nosotros allá arriba que no se deteriora con el paso del tiempo y donde los ladrones no se meten. Hay un Cielo prometido para los que le aman, para los que rinden a Él su vida. Los sufrimientos de esta tierra no se pueden comparar con el gozo, la paz y las bendiciones que nos esperan en nuestro verdadero hogar.  

Si el Espíritu de Dios mora en ti, Él te está constantemente dándote la certeza de que hay un futuro mejor, una preciosa herencia que no merece ser cambiada por nada en esta tierra; por las cosas que valora esta sociedad.

¿Estás viviendo tu vida conforme a esa verdad? ¿Estás invirtiendo tu vida en Dios? ¿Estás caminando en esta tierra como Dios quiere? ¿O estás valorando más las cosas del más acá (las cosas de este mundo)? “Mintamos, Bebamos, pequemos, que mañana moriremos” Dios te ofrece una gran herencia, pero con tu modo de vivir, con tu desobediencia al Espíritu de Dios tú puedes decirle a Dios: no la quiero!!

Esta tierra es solo un lugar de paso. No deberíamos apegarnos a las cosas de acá. Nuestro corazón debería estar escuchando cada día al Espíritu Santo decir: Tú no eres de esta tierra, tienes una herencia en el cielo, vive de acuerdo a esa verdad.

Lo que el Espíritu Santo hace en nosotros es grande. El ser libres del temor,  el privilegio de llamar a Dios Padre, y la certeza de que nos espera una gran herencia son cosas que  solo Él puede hacer en nuestro interior.

¿Ya has recibido al Espíritu de Dios en tu vida mediante el nuevo nacimiento? ¿Ya fuiste bautizado con el Poder del Espíritu Santo? ¿Estás dejando al Espíritu Santo obrar en ti? ¿Está el Espíritu Santo obrando en ti de la forma en la que hablamos hoy?

Lucas 11:13 dice:
Pues si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!

Pidámosle a Dios el Espíritu Santo.

Cuarta y Última Entrega.

4. Mediante el Espíritu Santo Somos ayudados en nuestras debilidades. V 26ª Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. 

  Somos débiles. Debilidades: áreas donde reconocemos que nos falta mucho. No podemos decir que no tenemos áreas débiles, organizaciones, grupos, personas por más excelencia que tengan tienen áreas débiles. Hasta hay un formato donde una de las cosas que se evalúan son las debilidades: FODA. Es importante reconocer eso.

   Hablando de lo personal. En lo laboral, en lo ministerial, no tenemos todos los dones, “A mí como que me falta fuerza, cómo que me falta diligencia, liderazgo” no sabemos toda la información, por más estudios que tengas, por más habilidades que tengas, siempre tendremos áreas débiles ¿o tú te las sabes todas? A VECES SOMOS ARROGANTES Y VIVIMOS, CREEMOS, DECIMOS, ACTÚAMOS COMO SI NOS LAS SUPIERAMOS TODAS, COMO SI TUVIÉRAMOS TODO BAJO CONTROL, COMO SI NO NECESITARMOS DE NADA, COMOS SI NO TUVIÉRAMOS DEBILIDADES. PERO La gran verdad es que tenemos áreas débiles.

  En nuestro carácter y en nuestra espiritualidad tenemos áreas débiles. Hay problemas persistentes, algunos luchan con la ira, algunos luchan con el desánimo, otros con temor, otros luchan con tentaciones recurrentes, falta de perdón, malos pensamientos, DEPRESIÓN, luchas con la mentira, con el orgullo, con la gula, en el área moral. Debilidades. 

  ¿Cuál es tu debilidad? Ahh, mi debilidad son Los Postres, La ropa, el cine…  sea serio, esa no es la pregunta. ¿sabes que esta es una de las preguntas que se hacen en las entrevistas de trabajo? Si tú respondes de esta manera, cómo evadiendo la pregunta, tendrás un punto menos en tu entrevista. DELANTE DE DIOS, Esta pregunta es pera responderla con mucha humildad y con total honestidad. 

  Delante de Dios es importante que tú identifiques y reconozcas tus verdaderas debilidades. ¿Cómo te va a ayudar el Espíritu Santo si “no tienes debilidades”?

 Cuando alguien viene a pedir nuestra ayuda como pastores, nosotros lo único que pedimos es que sean totalmente honestos, que sean transparentes, que no nos oculten cosas, que cuando uno pregunte ciertas cosas que para nosotros pueden ser clave para brindar esa ayuda haya la valentía y la humildad de decir toda la verdad. Cuánto más Dios cuya esencia es la verdad, espera esa transparencia de nosotros en cuanto a nuestras necesidades.

   Mira, Dios conoce tus debilidades, ÉL no se va a sorprender con lo que le digas. Él no se va a beneficiar porque tú seas honesto, realmente el bendecido vas a ser tú, Dios da gracia a los humildes, al altivo mira de lejos.

  La vida y enseñanza de Jesús es muy interesante: una vez estaba Jesús sentado a la mesa, comiendo con los cobradores de impuestos, entonces los fariseos, que eran los religiosos, justos y buenos en su propia opinión, le reclamaron a Jesús, ¿Por qué comes con ellos? Él les dijo, los sanos no necesitan médico, solo los enfermos, no he venido a llamar a los Justos sino a los pecadores al arrepentimiento: Yo me pregunto, ¿es que estos fariseos eran muy justos? ¿es que estos fariseos no eran pecadores? ¿Es que no estaban enfermos de ese cáncer espiritual que es el pecado? La respuesta es sí. Jesús no lo estaba diciendo así: no se preocupen, ustedes no me necesitan, es que ¡Son tan buenos! 

Jesús lo que estaba diciendo: Yo he venido por los pecadores como estos que están sentados conmigo, que reconocen exactamente su pecado, y he venido por pecadores como ustedes, pero ustedes no lo reconocen, se creen demasiado buenos, cuando ustedes reconozcan su pecado, cuando reconozcan que están enfermos yo estoy con los brazos abiertos, yo los puedo salvar, mientras no lo reconozcan y se arrepientan yo no puedo hacer nada.

Reconoce tú pecado, reconoce tus debilidades para que Dios pueda hacer algo en tu vida.

 ¿Cuáles son tus debilidades? ¿Tienes tú debilidades? Si no tienes entonces el Espíritu Santo no es para ti, pero Si lo reconoces, y si lo has recibido a Jesús, y al Espíritu de Dios en tu vida, si le das cabida, ahí está el Espíritu Santo para darte ayuda en el momento que lo necesites. Para fortalecerte en esas áreas débiles. Dice la Biblia, el débil dirá fuerte soy, 

   Entonces, si tú eres guiado por el Espíritu Santo, si dejas que él te guíe, si le das cabida en tu vida y reconoces tus debilidades, orando para que Dios te fortalezca, el Espíritu Santo viene sobre ti para darte su ayuda, para fortalecerte y darte la victoria en medio de la debilidad. Dice la Palabra, “el débil dirá fuerte soy” Pablo decía, “su poder se perfecciona en nuestra debilidad”

   Este viernes 14 de Septiembre de 2012 la iglesia cumplió 4 años de haber abierto las puertas de esta casa para la adoración, la oración, la búsqueda de Dios y la predicación de su palabra. Yo doy gracias a Dios que en estos años ha obrado en nuestra iglesia, a pesar de nuestras debilidades, a pesar de nosotros, de todo lo que nos falta como líderes, hemos visto cómo Él se ha glorificado, pero ha sido por su Espíritu Santo, no por nuestra habilidad, ni persuasión, ni carisma, solo porque  Él ha suplido lo que a nosotros nos falta, porque ante la debilidad del hombre, que depende de Él hay un Dios que fortalece con su gran poder a sus hijos. 

Déjate guiar por el Espíritu Santo, permite que Él te fortalezca, y cree sin dudar que Él te llena de poder, para salir adelante en medio de las debilidades.

5. Mediante el Espíritu Santo podemos orar de manera efectiva. 26b-27…. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras. 27 Y Dios, que examina los corazones, sabe cuál es la intención del Espíritu, porque el Espíritu intercede por los *creyentes conforme a la voluntad de Dios.

        Hay ocasiones que en nuestros tiempo de oración nos quedamos en blanco, no sabemos cómo orar, no sabemos que pedir, habiendo tantos motivos, no se nos ocurre ninguno, A veces alguien nos pide oración y nosotros, muchos con una experiencia con Dios, no sabemos cómo pedir a Dios por ese hermano, otras veces estamos intercediendo por la iglesia, o por la ciudad o el país y NO SABEMOS POR DÓNDE EMPEZAR, es ahí donde necesitamos la intervención del Espíritu Santo que mora en nuestras vidas.

  Me invitaron a un tiempo de oración por la ciudad, no la persona que estaba dirigiendo ese tiempo de oración dijo: “Hermano, profetiza sobre la ciudad” Yo quedé en blanco, ¿qué profetizo? ¿Riqueza? ¿Prosperidad? ¿Que no se roben la plata? No sabía realmente que orar en ese tiempo, pero el Espíritu Santo me dirigió a orar por Salvación, a profetizar salvación sobre la gente. Así que profeticé todo lo que tiene que ver con salvación: Arrepentimiento, fe, gracia de Dios, búsqueda de Dios.

  Ayer en la oración me dieron una bandera, y yo muy inexperto con eso, casi le doy a otro pastor, la señora que estaba en la otra fila se tuvo que quitar, y este pastor cerró los ojos y casi me la pone a mí. ¡Casi muero de un banderazo! ¿te imaginas la noticia en "Al Día"? Casi me da porque estando tan concentrado en la adoración cerró los ojos. No estaba mirando. ¿por qué les cuento esto?

A lo que voy con esto es que: Hay varias formas de romper una piñata: con los ojos cerrados, (dando palazos al aire, a ver si le pegas. Hay unos que rompen cabezas, que le dan al que cumple años, que lo meten en la torta) o con los ojos abiertos, apuntándole al objetivo, a lo seguro.

A veces alguien nos pide oración “tengo un dolor en la espalda” y somos como el que rompe la piñata, ¿será un demonio? ¡¡¡Espíritu inmundo!!!, ¿será muscular? ¡Ordeno que el músculo se relaje!. ¿Será de la Columna? ¡¡¡Columna vertebral enderézate!!! Será solo un dolor? Dolor fuera… Orando por todo a ver si le pega a alguna por lo menos de ladito. Pero dependiendo del Espíritu Santo, pidiendo su guía y ayuda en la oración vamos a la fija, a lo seguro, exactamente por lo que tiene que orar. 

Dios quiere que vayas a la fija. Si es sanidad, la oración exacta por la enfermedad exacta, si es espiritual, echando fuera lo que es, si es emocional, dando en el blanco, eso no lo vamos a lograr porque seamos muy inteligentes, ni porque seamos grandes astrólogos, o adivinos, no por nosotros, sino que lo vamos a lograr por el Espíritu Santo que habita en nosotros y nos guía en la oración.

 Cuando aun así no sabemos, Él nos da un lenguaje espiritual, el hablar en lenguas, con el que tú puedes dirigirte a Dios y Él te escucha atentamente. Es decir, cuando oras en lenguas, no sabes lo que estás pidiendo, pero Dios, por medio de su Espíritu te ayuda a orar y entiende lo que tú le estás diciendo, entonces te sientes fortalecido, sientes la presencia de Dios.

En todo caso, Dios, por su Espíritu Santo te puede ayudar en tu vida de oración, en esos momentos que no sabes que pedir, o qué más pedir, en esos momentos en que quieres pasar más tiempo con Dios y todas las cosas que querías pedir las solicitaste a Dios en 5 minutos, (qué pido el resto del tiempo?) en esos momentos que tienes que orar por alguien y no sabes cómo, ahí está el Espíritu Santo para darte la ayuda en el momento en que más lo necesitas.

6. Mediante el Espíritu Santo somos transformados a la imagen de Jesús. v 28-29 Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman,[e] los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. 29 Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.

  La vida Cristiana es un proceso en el cual poco a poco vamos creciendo, Dios nos va santificando, nos regenera y nos hace cada día más parecidos a Jesucristo. Ese proceso no es posible sin el Espíritu de Dios en nosotros.

  No podemos cambiar a menos que sea por medio del Espíritu de Dios. Puedes tratar en tus fuerzas y podrás alcanzar algunas cosas en tu vida, a punta de fuerza de voluntad, de diligencia, pero esa santificación, el crecer a la estatura de un varón perfecto a la medida de Cristo Jesús solo se puede lograr por la obra del Espíritu Santo en nuestra vida.

  Ponte a pensar: Desde cosas como el perdón a quienes nos han hecho daño cómo Jesús lo hizo, hasta vencer tentaciones cómo Jesús lo hizo, desde amar como Jesús amó, hasta hacer las cosas que Él hizo y que dijo que nosotros podíamos hacer, solo son posibles por la gracia y el favor de Dios que vienen cuando el Espíritu Santo viene a nuestras vidas.

  Yo he visto cómo mucha gente, líderes, pastores, quieren tratar de cambiar a las personas de una manera externa. Tienes que dejar de hablar así, tienes que ponerte tal ropa, tienes que dejarte crecer el pelo, tienes que cortártelo, tienes que dejar de usar piercing. Si el Espíritu Santo no está haciendo una obra interna, lo que estamos haciendo es disfrazar a la gente de Evangélicos, para salir a pedir dulces el 31 o para que salgan en carnavales. (La comparsa de los aleluyas!!!). Pero sin un cambio significativo en sus vidas, muy religiosos por fuera pero por dentro muy mal. Si vamos a tener un cambio va a empezar en el interior y ese cambio va a ser por el Espíritu Santo.

 A veces pensamos que vamos a cambiar a la gente, pero esa no es nuestra chamba, el que cambia a las personas es el Espíritu Santo, no nosotros, lo que hacemos es usurpar el lugar de Dios, no pretendamos eso.

 "Yo me caso con esta persona, él dice que es cristiano pero no viene a la iglesia, es mujeriego, parrandero, malgeniado y tomador, pero yo sé que el cambia, yo lo voy a cambiar" Hay mujeres que han creído esta mentira solo para estrellarse contra el mundo y para vivir una vida llena de dolor. 

  Si el Espíritu Santo no nos transforma estamos en nada, si tú no le estás dejando al Espíritu Santo transformar tu vida, dependiendo de Él para vivir la vida que Dios quiere que vivas, si no te expones a su presencia para ser transformado, si estás intentando cambiar en tus fuerzas, déjame decirte que lo que tú estás viviendo en una religión, no una relación con Dios y uno no puede ser como Cristo a punta de religión, tú necesitas dejarte ministrar por el Espíritu Santo, no resistirte a lo que Él quiere hacer. Solo de esa manera, nos va a ser quitado el Velo, y Dios, quien es el Espíritu nos hará más y más parecidos a Él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.

  Dale cabida al Espíritu Santo en tu vida, déjalo obrar en tu vida, pídele y permítele que se mueva con poder en tu vida, para que sufras esa transformación que solo Él te puede dar.

Qué grandes cosas las que el Espíritu Santo puede hacer en nuestras vidas, cuando nos exponemos a su presencia, cuando le anhelamos más que a la vida, cuando se lo pedimos a Dios de corazón, cuando nos tomamos en serio sus promesas para nuestras vidas.

¿Y tú? ¿Le estás dando cabida al Espíritu de Dios en tu vida?
¿Vives en esa dependencia diaria de Dios?
¿Lo estás invitando día a día a que te dirija?
¿Estás dejando que Él sea el motor de tu vida?

¿O estás viviendo de manera arrogante pensando: Yo puedo solo!!! No necesariamente con tus palabras pero con tus actitudes y tus hechos le estás diciendo, Espíritu de Dios, no te necesito!!!?

Toma la decisión de rendirte hoy por completo a la guía, dirección y a la persona del Espíritu Santo de Dios.


Todo a Cristo, yo me entrego 
con el fin de serle fiel, para siempre 
quiero amarle y agradarle solo a El. 

Yo me rindo a El, yo me rindo a El, 
todo a Cristo, yo me entrego quiero serle fiel.


1 comentario:

  1. Dios te bendiga Pastor soy el Pastor Alex francisco Martinez de Costa Rica ayudame a orar por mi salud los medicos dicen que nesecito un trasplante de Riñon

    ResponderEliminar