martes, 16 de marzo de 2010

Sanidad: la voluntad de Dios para sus hijos.

Uno se encuentra en la vida con gente enferma, entubada, con cámara de oxigeno, con dextrosa, enferma, vuelta nada y uno le pregunta: ¿Cómo estás? Y la persona contesta con resignación: "aquí, estoy como Dios quiere que esté".

Es fácil encontrar personas que creen que están enfermos porque esa es la voluntad de Dios.

Dios es bueno, nos ama, su voluntad es realmente buena agradable y perfecta, y no es su voluntad que estemos enfermos. Dios quiere que estemos sanos.

Hay una cosa de la cual debemos estar convencidos y es a siguiente: la Sanidad es la voluntad de Dios.
Veamos en la Biblia, a través de la historia, la demostración que la sanidad es la voluntad de Dios para sus hijos.

1. En el antiguo testamento vemos que la sanidad es la voluntad de Dios.

a. Ex 15: 26 y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador.

• La sanidad relacionada con la obediencia. Dios promete guardar a su pueblo libre de enfermedades, pero ellos debían obedecerle. La verdad es que si tu le obedeces te evitas enfermedades. Sexo: venéreas - Licor: Enfermedades hepáticas y demás. Amargura: gastritis, artitis.

• La enfermedad entro al mundo por el pecado. Así como entró la muerte por el pecado, entró también la enfermedad. Es decir, hay enfermedad en el mundo a causa del pecado.

• Algo que vemos aquí, desde el antiguo Testamento, muy temprano en la Biblia, Dios se presenta como nuestro sanador. Jehová Rapha, es la es la palabra Hebrea para Doctor, Dios desde el AT quiso ser el doctor de Israel, y quiere hoy ser nuestro médico.

b. La sanidad relacionada con la adoración 23:2525 »Adora al SEÑOR tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. »Yo apartaré de ustedes toda enfermedad.
Adoración como modo de vida, no solamente como un acto que hacemos cuando nos reunimos en la iglesia, una vida que adora a Dios, es una vida que puede reclamar sanidad para su vida.

c. Salmos 103:3 Él perdona todos tus pecados y sana todas tus dolencia La sanidad relacionada con el perdón de pecados. Dios quiere perdonar tus pecados y sanar tus enfermedades. El perdón de pecados y la sanidad van de la mano. El pecado trajo enfermedad al mundo, una vez te arrepientes, Dios te limpia, y muchas veces solo con eso eres sanado. Mientras callé se envejecieron mis huesos… mi pecado declaré.

Isaías 53: 4 Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores, pero nosotros lo consideramos herido, golpeado por Dios, y humillado. 5 Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra *paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados.

2. En el ministerio de Jesús vemos que la sanidad es la voluntad de Dios.

a. Lucas 5:12-1312 En otra ocasión, cuando Jesús estaba en un pueblo, se presentó un hombre cubierto de *lepra. Al ver a Jesús, cayó rostro en tierra y le suplicó: —Señor, si quieres, puedes *limpiarme. 13 Jesús extendió la mano y tocó al hombre. —Sí quiero —le dijo—. ¡Queda limpio! Y al instante se le quitó la lepra.  Jesús sí quiere sanarnos, el problema no es que quiera, el problema es si yo creo, que él puede y que él quiere.

b. A veces decimos, si Dios quisiera sanarme, ya lo habría hecho, si quieres sáname. Esto nos lleva a vivir resignados, esto no es lo que Dios quiere. Ponemos le responsabilidad en Dios, hacemos a Dios responsable de la enfermedad. Dios pone la responsabilidad en nosotros. Jesús nos dice: Yo quiero, yo puedo, tú, ¿tienes fe? Mr 9:22-2322 Muchas veces lo ha echado al fuego y al agua para matarlo. Si puedes hacer algo, ten compasión de nosotros y ayúdanos. 23 —¿Cómo que si puedo? Para el que cree, todo es posible. 24 —¡Sí creo! —exclamó de inmediato el padre del muchacho—. ¡Ayúdame en mi poca fe! 25 Al ver Jesús que se agolpaba mucha gente, reprendió al *espíritu maligno.

c. Hch 10:38 Me refiero a Jesús de Nazaret: cómo lo ungió Dios con el Espíritu Santo y con poder, y cómo anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él. Jesús quiere sanarnos, el diablo es quien quiere enfermarnos, él es quien enferma, oprime a la gente. Nunca vuelvas a decir, estoy enfermo por la voluntad de Dios.

3. En el ministerio de los creyentes en la iglesia primitiva vemos que la sanidad es la voluntad de Dios

a. Hech 8:6 Al oír a Felipe y ver las señales milagrosas que realizaba, mucha gente se reunía y todos prestaban atención a su mensaje.7 De muchos endemoniados los *espíritus malignos salían dando alaridos, y un gran número de paralíticos y cojos quedaban sanos.8 Y aquella ciudad se llenó de alegría.

b. Hechos 3:1-10 el paralítico de nacimiento.

c. Los primeros discípulos lo practicaban, la gente era sanada, lo que muestra que Dios si quiere sanar a los enfermos.

4. En el ministerio de los creyentes en la iglesia de hoy vemos que la sanidad es la voluntad de Dios. Hoy la sanidad sigue siendo la voluntad de Dios.

a. Aimie Sample, muletas y sillas de ruedas em el Angelus Temple, dejadas por quienes recibieron sanidad. predicadores, lideres, evangelistas, creyentes ministran sanidad, en esta iglesia hay muchos testimonios de sanidad.

b. Heb 13:88 *Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos.

c. Mayores cosas. Sombra de Pedro, Paños y delantales, Juan 14:1212 Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre.

d. Para todo el que cree. Mc16:17-1815 Les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien las buenas *nuevas a toda criatura.[b]16 El que crea y sea bautizado será salvo, pero el que no crea será condenado.17 Estas señales acompañarán a los que crean: en mi nombre expulsarán demonios; hablarán en nuevas lenguas;18 tomarán en sus manos serpientes; y cuando beban algo venenoso, no les hará daño alguno; pondrán las manos sobre los enfermos, y éstos recobrarán la salud.»

• Dios si quiere, solo pide tu fe.

Para recibir sanidad:

- Cree que Dios puede hacerlo y quiere hacerlo. Que la sanidad es su voluntad.

- Pide perdón: en la Biblia vemos que la sanidad está relacionada con el perdón de pecados

- Ora por tu sanidad

- Pide oración

- Recibe tu sanidad por la fe.

Para ministrar sanidad:

- Activa la fe de la gente.

- Ora con fe, convencido que Dios quiere y puede hacerlo.

- Ora por otros imponiendo manos.

- Ora por otros ungiéndolos con aceite.

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