Joh 10:27
Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen.
Hay
cosas que no quisieras que nadie haga por ti.
-
Comer
– tomar liquido
-
Tomar
vacaciones
-
Dormir
Hay
una experiencia en la vida que no quisieras que otro haga por ti. Eso es
escuchar la voz de Dios.
No
espiritualidad prestada – voy a preguntarle al pastor que le dijo Dios de mi…
voy a comprarme un libro de devocional, para que Dios me hable… eso es lo que
Dios le mostró a ese escritor, y que bonito leerlo, pero Dios quiere mostrarte
a ti tu parte.
Si
algo caracterizaba a Jesús es que Él escuchaba la voz de Dios.
Como
Jesús nosotros podemos escuchar la voz de Dios.
Hoy
en día la gente quiere tips para todo: para cocinar, para tocar un instrumento,
para manejar los programas.
Quiero
que Estudiemos unos tips para escuchar la voz de Dios. ¿a cuántos le interesan
esos tips?
Veamos
cuales son esos Tips que nos van a ayudar a escuchar su voz.
1.
Para
escuchar la voz de Dios necesitas tener Un tiempo y un espacio dedicado a Él.
Jesús hacía esfuerzos intencionales para escuchar la voz de Dios. Mc 1:35 Muy
de madrugada, cuando todavía estaba oscuro, Jesús se levantó, salió de la casa
y se fue a un lugar solitario, donde se puso a orar. Luc 5:16 Él, por su parte, solía retirarse a lugares
solitarios para orar
a.
Necesitamos
un rincón del mundo para reunirnos con Dios.
i. Jesús buscó un lugar solitario.
ii. La madre de los Wesley se
reunía con Dios debajo de las cobijas.
iii. Escuché de una pastora que se
reunía con Dios en el baño
iv. Un pastor cuenta que se reunía
con Dios cuando sacaba al perro.
v. Jesús Adrián cuenta que se
reúne con Dios en la calle mientras está trotando.
vi. Hay otros que se van a la
cocina y se toman un café con Dios.
b.
Necesitamos
un tiempo regular para reunirnos con Dios.
i. Jesús lo hacía en las mañanas,
sin embargo en otras ocasiones se pasaba la noche en oración.
ii. Hay otros escritores bíblicos
que tenían su encuentro para hablar con Dios en las mañanas. «De mañana mi oración se presentará delante
de ti» (Salmo 88.13 ).
iii. Otros prefieren por la noche y
concuerdan con la oración de David: «Suba mi oración delante de ti como … la
ofrenda de la tarde» ( Salmo 141.2).
iv. Otros prefieren muchos
encuentros durante el día. Al parecer el autor del Salmo 55 lo hacía así.
Escribió: «Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré» ( Salmo 55.17 ).
c.
Debemos
buscar el lugar y el tiempo apropiados para dedicarnos a escuchar la voz de
Dios. Que se lo dedicamos especialmente a Él, donde el resto no es importante,
donde nuestra concentración está totalmente en Él.
d.
Concéntrate
en la calidad de ese tiempo, no tanto en la cantidad.
Que
no sea una carga, como un tiempo que dedicas como por cumplir. Como una alumnita de música que venía
obligada y solo miraba el reloj y preguntaba, a qué hora va a terminar- o una
visita obligada, en la que no hay tema – y entonces!!! Ajá y qué más!!!
Que
sea Un tiempo intenso, que le dedicas de corazón, de total concentración con
Dios. 15 minutos intensos, 20 minutos, a
medida que vas creciendo en esta relación quizá querrás estar más tiempo con Él.
Tienes
ese tiempo? Ya sospechas cual puede ser ese lugar? Piensa en ese lugar, piensa
en ese horario y empieza desde ya a tener esos tiempos con Dios.
2.
Para
escuchar la voz de Dios necesitas tener Unos oídos abiertos. “El que tenga oídos para oír que oiga” (ocho
veces en Apocalipsis) 2:7,11
a.
No
basta con tener oídos, hay que usarlos. Quítate la cera de los oídos, quítate
los tapones y úsalos para escuchar a Dios.
b.
Cuantas
veces nos ha pasado que alguien nos está hablando, pero al final decimos ¿qué
fue lo que dijo? Me ha pasado que le pregunto a la persona su nombre, como se
llama? Y al rato le vuelvo a preguntar, como es que se llama? Julio. Ahhh,
bueno señor Roberto, como le venía compartiendo….
Ya
que tenemos oídos, necesitamos darles uso. Necesitamos conectar nuestros oídos
con nuestra mente y nuestra mente con el corazón.
c.
Muchas
veces paramos oreja a lo que no debemos escuchar. Oímos detrás de la puerta y
decimos: “si supieras de lo que me enteré sin querer”
Muchos
quisieran tener ese aparato de tele ventas que le ayudan a uno a escuchar a la
distancia, para enterarse de todos los chismes.
Pero
en cuanto a oír a Dios estamos con los oídos tapados.
Las
mamás cuando los hijos se hacen los sordos: “saca la basura” ahhh? Quee? La
mamá responde: tienes oídos para lo que te conviene, no?
A
veces nos hacemos los sordos con Dios, pero te aseguro que escucharle te
conviene.
d.
Oídos
abiertos quiere decir que Hay que estar atentos a lo que Dios nos quiere decir.
En el tiempo de la predica por ejemplo. Oídos abiertos para escuchar lo que
Dios quiere decir.
e.
Esto
me habla de dos momentos en la oración. Uno en el que le digo a Dios lo que le
tengo que decir. Pensamos que eso es lo único. Pero hay otro en el que uno
escucha, se dedica a abrir sus oídos.
f.
La
gente va al sicólogo, yo conozco gente que lo visita para pedir consejo, pero
que tal alguien que va al sicólogo y le cuenta su problema, estoy de pelea con
mi pareja y no sé si regresar, yo sé que él es buena persona, se pregunta ella
misma? debería perdonarlo no? Usted que dice? Si no? Él se portó mal, pero es
bien lindo no? Qué me aconseja? Que lo busque verdad? Si es lo mejor. Gracias
doctora. Y luego la recomienda: una sicóloga buennissima… Nunca dijo nada, no
la dejó hablar… a veces somos así con Dios.
g.
Hablamos
y hablamos y no le escuchamos. No le damos espacio a Dios de que nos hable, que
nos aconseje, que nos guíe.
h.
Una
de las cosas que hacemos en este tiempo del que hablamos antes es orar, que es
hablar con Dios, nota que no dije hablarle a Dios. Darle una conferencia, una
enseñanza. Etc. Si tú quieres una conversación así, búscate un muñeco, o un
salón de clases. Pero con Dios no es así, tú le hablas, Él te responde, Él te
habla, tú le respondes.
Sabes
que esa es una diferencia entre Dios y los ídolos? Los ídolos no hablan, tú les
puedes pedir cosas pero ellos seguirán ahí, Con su misma cara. Tu les puedes
hablar, pero ellos a ti no… no te piden nada, más bien tú les pides a ellos. En
cambio cuando tú hablas con Dios, si le dejas, él te responde. Él te confronta,
Él te pide cosas.
i.
A
un pastor le preguntan ¿cuánto tiempo debo dedicar cada día a la oración? El
responde: el necesario para que tú le digas lo que le tienes que decir y para
que Él te diga lo que te tiene que decir.
j.
Tú
tienes que orar y pedirle Dios que te
haga sensible a su voz.
k.
En
la práctica cual es mi sugerencia? Dile a Dios lo que tengas que decirle, y no
te vayas tan rápido pasa un tiempo más en silencio, con los oídos espirituales
abiertos esperando lo que Dios quiere decirte.
Psa 5:3 Por la mañana,
SEÑOR, escuchas mi clamor; por la mañana te presento mis ruegos, y quedo a la
espera de tu respuesta.
l.
Vale
la pena ejercitarse en el arte de oír con nuestros oídos lo que Dios nos está
diciendo.
3.
Para
escuchar la voz de Dios necesitas tener Una Biblia abierta. Salmos 119:
a.
No
hablo de la Biblia abierta en el Salmo 91, como un bonito adorno, o como un
objeto para rendirle culto, (un amigo le daba besos, la leía solo cuando le
ponían tareas de religión que fueran con Biblia) NO, yo hablo de una Biblia
abierta para Leerla.
b.
No
al azar. Cómo un horóscopo o algo así. Bibliomancia.
c.
Jesús
leía la Biblia, nunca encontrarás en los evangelios que la Biblia mencione:
Jesús sacó su nuevo testamento de la mochila y empezó a leer. Pero sí que la
conocía, sí que la sabía usar, lo sabemos porque al enfrentarse a la tentación
la citaba con autoridad, le decía al tentador: escrito está. También en la
sinagoga lo encontramos leyendo una porción del libro de Isaías y al final
dijo, hoy se ha cumplido esta Palabra…
d.
La
Biblia es la Palabra de Dios, a través de ella escuchamos a Dios mismo hablando
directamente a nuestras vidas.
e.
Hace
un tiempo había una propaganda cuyo slogan era: “No coma cuento, coma carne”
“yo te digo: “no coma cuento, coma Biblia”
f.
En
ese tiempo y espacio del que hablamos, (que debe ser diario), una de las cosas
que debemos hacer es Leer la Biblia. ¿Cómo podemos hacerlo?
i. Lee en oración- pide al
Espíritu Santo que te guíe, que te de entendimiento, que te de revelación de su
Palabra.
ii. Lee de una forma sistemática,
organizada. Empieza en Juan -
iii. Entre 2 y 4 capítulos.
iv. Léelo por tiempo- Hasta que una
porción te golpee. Medita durante el día en ese texto.
v. Importante que leas con el
deseo y la disposición que Dios te hable, no por salir del paso o cumplir con
una penitencia. (como cuando te portaba mal y el sacerdote te decía reza tantos
Padre Nuestros)
vi. Sal de aquí con la decisión
tomada de leer la Biblia diariamente.
4.
Para
escuchar la voz de Dios necesitas tener Una Libreta abierta. Escribe la visión…
Hab 2:2 Y el SEÑOR me respondió: «Escribe la visión, y
haz que resalte claramente en las tablillas, para que pueda leerse de corrido.
a.
Escribe
tus peticiones, escribe lo que Dios te está mostrando al orar. Si no estás
seguro escríbelo de esa forma. “Me parece que Dios me está queriendo decir:
Creo que Dios me está diciendo: tengo este sentir de Dios: ” Pídele a Dios
confirmación del asunto. Escribe todo -
b.
Escribe
lo que Dios te está diciendo al leer la Biblia.
i. Un versículo que te tocó
ii. Lo que Dios te mostró a través
de ese versículo
iii. Cómo aplicaras este versículo
en tu vida
c.
Uno
a veces no cree que Dios le está hablando, hasta que a los años abre la
libreta.
5.
Para
escuchar la voz de Dios necesitas tener Un corazón abierto.
Mateo
7:24 Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es
como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.
a.
Dios
nos habla a través cuando oramos, cuando leemos la Biblia, cuando escuchamos un
sermón, incluso cuando no estamos haciendo nada espiritual. (cuando estamos
dormidos) pero tenemos que tomar la decisión de obedecerle.
b.
Un
corazón dispuesto a obedecer lo que Dios nos está pidiendo. Un corazón que pone
en práctica lo que Escucha de Dios.
c.
SI
TU OBEDECES LO QUE ÉL TE MUESTRA DIOS TE VA A DAR MÁS, TE VA A REVELAR MÁS
COSAS.
d.
GENTE
SE PREGUNTA: POR QUÉ DIOS NO ME HABLA, O ME DEJÓ DE HABLAR? EN MUCHOS CASOS LA
RESPUESTA ES, PORQUE NO HAS HECHO LO QUE YA TE DIJO QUE HICIERAS.
El
profesor Burbano es un profesor de saxo, vive en Bogotá, les decía a los
alumnos, haga estos ejercicios. Cuando el alumno llegaba a la siguiente clase,
le pedía que le mostrara los ejercicios, si se daba cuenta que el alumno no los
tenía lo devolvía de clases sin enseñarle nada más, lo mandaba a la casa a que
hiciera los ejercicios, cuando los haya hecho regrese!!!
Dios
te quiere enseñar más cosas pero empieza por las que ya él te ha mostrado.
(perdonar, diezmar, ser compasivo, dejar la mentira…) que no te devuelva a tu
casa y te diga, regresa cuando hayas hecho la tarea…
e.
Jesús
no solo escuchaba a Dios, obedecía sus mandamientos, seguía sus consejos.
f.
Se
de gente que cuando tú le vas a hablar de Dios te dice: es que yo conozco la
Palabra muy bien, de chiquito iba a la iglesia, estudie en colegio cristiano.
Pero algunos de esos nunca van a la iglesia, les son infieles a sus parejas.
Ahh pero eso sí: ¡Yo conozco la palabra! De que te jactas? Si la tienes en la
cabeza pero no llega a tu corazón, de nada te sirve, si la lees y no la aplicas
no estás haciendo mucho.
g.
Es
frustrante cuando alguien te pide un consejo pero quien te lo pide hace
exactamente lo contrario. Les pasa a los padres, a los sicólogos, a los
pastores. ¿Cómo se sentirá Dios cuando te cuenta sus secretos, cuando te da el
mejor consejo, cuando te dirige hacia una decisión y tú haces todo lo
contrario?
h.
Un
corazón abierto se refiere a un corazón dispuesto a hacer lo que Dios le está
hablando, lo que Dios le está diciendo que haga.
i.
Y
tú? Solo te gusta escuchar prédica, leer la Biblia? O realmente tienes un
corazón abierto a lo que Dios te quiere mostrar, para ponerlo en práctica?
6. Para escuchar la voz de Dios necesitas una
Línea abierta. 1 Tes 5:17.Oren sin cesar – Efesios 6:18 orando en todo tiempo
en toda oración y súplica en el Espíritu.
a.
Una
comunicación todo el día. Dios debe estar presente todo el día, cada hora, cada
minuto Dios debe estar en la mente y el corazón del creyente.
b.
Aunque
en la mañana oramos, no debemos dejar de tener comunicación con Dios, debemos
tener los canales de comunicación abiertos. Donde yo durante el día levanto oraciones
cortas, y Él me da respuestas oportunas.
c.
Hoy
en día la tecnología ha avanzado tanto que si tú estás empapado de ella, es
fácil que te localicen o que tú puedas localizar a alguien. Messenger, Skype,
Facebook, fijo, Celular, Blackberry. Mi esposa siempre escribe a amigas o a su
hermano en el Perú: dile a mi papá que se conecte… Un amigo me estaba saludando
en el msn, me preguntó, y cómo está Lorena? Yo le dije enviciada con el
Blackberry, el me dijo: “y yo que quería vender el mio” le pregunté por qué? Me
dijo me localizaban muy fácilmente. Apágalo…
d.
No
es sabio apagarle el celular a Dios. O ponerle a Dios la señal de ausente, o
bloquearlo en tu messenger. Acuérdate que eres su servidor. Hay mensajes que
quiere darte, advertencias que quiere hacerte, quizá te necesita para algo en
un momento específico. Debes mantenerte
alerta a lo que ÉL te quiere decir durante el día. Tal vez una noticia, un
evento vivido, un sentir en el corazón para aconsejar a alguien, o para hacer
algo específico, tantas cosas usa Dios para hablarnos…
e.
Yo
relaciono el devocional como si cargaras tus equipos de comunicación en la
mañana, para estar atento a lo que quiere decirte durante el día. Entendamos
que el tiempo extendido no es el único momento donde debemos estar en contacto
con Dios. Ese tiempo exclusivo te hace sensible a Dios, sin embargo, no es el
único momento donde Dios quiere hablarnos, por eso es bueno estar con todos los
canales.
f.
Conéctate
con Dios, pásale tu pin, agrégalo en tu Facebook, en tu Messenger. Lo que
quiero decir es que estés en constante comunicación con Él. Con los canales de
comunicación abiertos todo el día. Orando todo el tiempo, enviándole mensajes y
escuchando su voz todo el día.
Hermanos,
hay algo increíble en esta vida, increíble pero cierto, Dios quiere comunicarse
con nosotros, Dos quiere hablarnos. Y más increíble aun, nosotros podemos
escuchar a Dios.
No
seas de los que te pierdes de esta bendición, de este privilegio de escuchar la
voz de Dios, permítele que te hable y pídele que te haga sensible a su voz.
Se
intencional en buscar los medios posibles para escucharle, en aplicar estos
tips para tu propia vida.
Con
su voz creo los cielos, la tierra, el mar, todo lo que habita el ellos, CADA
VEZ QUE DIOS HABLA CREA. Permite que lo haga en tu corazón, que haga algo nuevo
en tu vida.
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