miércoles, 30 de marzo de 2011

El Dios que conoce todo de mí. Parte 2.

Para una mejor comprensión, te invito a que mires la primera parte de este estudio, en el cual centramos nuestra atención en la Omnisciencia Divina y en las implicaciones que esto tiene en nuestra vida.

Vimos cuatro áreas de nuestras vidas que no son ocultas ante el Dios que todo lo sabe, cuatro áreas de nuestra vida que él conoce.

Conoce mi vida privada – conoce mi dolor – conoce mi debilidad – conoce mis necesidades –
Veamos cuatro áreas más que son de su conocimiento, y lo que esto significa para nosotros.

lunes, 21 de marzo de 2011

El Dios que conoce todo de nosotros


Hebreos 4:13 Ninguna cosa creada escapa a la vista de Dios. Todo está al descubierto, expuesto a los ojos de aquel a quien hemos de rendir cuentas.
Ezequiel 11:5 El Espíritu del Señor vino sobre mí y me ordenó proclamar: «Así dice el Señor: "Ustedes, pueblo de Israel, han dicho esto, y yo conozco sus pensamientos.
Salmos 139 1 Señor, tú me examinas, tú me conoces. 2 Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; aun a la distancia me lees el pensamiento. 3 Mis trajines y descansos los conoces; todos mis caminos te son familiares. 4 No me llega aún la palabra a la lengua cuando tú, Señor, ya la sabes toda. 5 Tu protección me envuelve por completo; me cubres con la palma de tu mano. 6 Conocimiento tan maravilloso rebasa mi comprensión; tan sublime es que no puedo entenderlo.
Salmos 139:23-24  Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón; ponme a prueba y sondea mis pensamientos. 24 Fíjate si voy por mal camino, y guíame por el *camino eterno.
Proverbios 15:3 Los ojos del Señor están en todo lugar, vigilando a los buenos y a los malos.

La Omnisciencia de Dios.

- Toda la información que existe no la tienen las Bibliotecas ni el Internet ni Harvard ni el Dane. La tiene Dios.
- Él sabe todo en cuanto a todo y a todos.
- Sabe los acontecimientos pasados presentes y futuros.
- Está atento a todo, nada le podemos esconder.
- No se olvida de nada.
- Nunca se equivoca.
- No necesita aprender nada de nadie.

Nos conoce perfectamente, sabe todo de nosotros.

Hay personas que nos conocen:

- Nuestros padres: sabe cuándo estamos bien o mal. A veces están hablando con nosotros por teléfono y parece que nos estuvieran viendo la cara.
- Nuestros hermanos.
- Vecinos - Buenos amigos:
- Líderes.

Sin embargo aunque haya gente que conozca mucho de nosotros, detalles íntimos, hay muchas cosas que se le escapan, la verdad están lejos de saber todo de nosotros, pero hay alguien que si conoce todas las cosas y que si nos conoce perfectamente.

Sabe todo de nosotros, conoce los secretos más profundos de nuestro corazón y puede ayudarnos con nuestras luchas, con nuestros problemas.
Veamos algunas áreas de nuestra vida que Dios conoce y las implicaciones que esto tiene para nosotros.

lunes, 14 de marzo de 2011

Áreas en nuestras vidas qué cambiaran si creemos en un Dios Omnipotente

Por Julio Guzmán

Omnipotente: Todo poderoso. Dios puede hacer lo que quiera, como quiera, cuando quiera.

No hay nada imposible para Él. Aunque hay cosas que nunca haría. Por Ejemplo, cosas tontas o sin sentido cómo “hacer una piedra tan grande que ni Él mismo pueda levantar” ni aquellas que van en contra a su voluntad, naturaleza, esencia y carácter.

Hay verdades que al creerlas tu vida es totalmente transformada.

- Colón creyó que la tierra era redonda, por ello se aventuró a viajar a estas tierras. Tomó decisiones respecto a esa verdad.
- Martin Luther King creyó que en USA los derechos para la gente de color podían ser iguales que los de los blancos. Por ello trabajó incansablemente en eso y hasta dio su vida. Hoy el presidente de Usa es de color.

Así pasa en la vida del hijo de Dios, su conducta y su vida entera cambia cuando injerta en su mente y en su corazón la verdad de que su Dios, el Dios Verdadero es Todopoderoso.

Hoy veremos cuatro áreas en nuestras vidas que cambiarían si creemos de verdad que nuestro Dios es todopoderoso.

Miremos esas cuatro áreas.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Concepciones erróneas acerca de Dios - Parte 3/3

Este es el tercero y último mensaje de la serie, mira los anteriores de la serie para ver el cuadro completo.

Continuando con nuestro estudio veremos las cinco últimas concepciones erroneas de Dios que estudiaremos, ídolos que están en nuestra mente y en nuestro corazón que no corresponden al Dios verdadero y que debemos derribar.

Veamos estos ídolos con la idea de identificar si les estamos adorando y con la dispocisión de derribarlos.
 
9. El dios alcahueta.
 
 Es un dios que a diferencia del indiferente se interesa por ti, pero no se mete con tus malas decisiones, nada te reprocha, te celebra todo, “te ama tanto…” que te deja “disfrutar la vida” hacer lo que se te venga en gana. Es como un dios “Peace and Love”

¿Quieres estar con el uno y con el otro? Tranquilo, lo importante es que los ames.

¿Quieres tener dos y tres mujeres? Fresco, siempre y cuando veles por todas y por los hijos que tengas con ellas, no hay problema.

¿Quieres conseguir dinero de manera fácil, pero deshonesta? Dale, siempre y cuando no le hagas daño a nadie.

 ¿has visto a un papá alcahueta? ¿has visto los frutos que esto trae a la vida de los hijos? No disciplinar al niño es no amarlo, quererlo es disciplinarlo.

Conozco a una niña que nunca la corregían, le celebraban sus maldades, le permitían que le hablara mal a su abuela y a sus familiares, le celebraban porque tenía novio en el colegio (7 años) ahora está un poco más grande y es un problema.

 Mi Biblia muestra que lo peor que puede pasarnos a los seres humanos es que Dios nos deje hacer lo que se nos da la gana. Las consecuencias de esto son tenaces.

El Dios verdadero es bueno, pero también es Santo, tres veces Santo. Y espera de nosotros que seamos santos. 1 Pedro 1:14-16 Como hijos obedientes, no se amolden a los malos deseos que tenían antes, cuando vivían en la ignorancia.15 Más bien, sean ustedes *santos en todo lo que hagan, como también es santo quien los llamó;16 pues está escrito: «Sean santos, porque yo soy santo.»

Nos conviene la obediencia, nos conviene la santidad. No nos perdemos de nada si somos santos, más bien nos libramos de muchas cosas.

Nuestro Dios no es un Dios alcahueta, de ser así estaría faltando a su amor y a su santidad. Es Santo y lo mismo espera de ti.